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martes, 29 de noviembre de 2011

Efecto Polaroid

Estaba leyendo las líneas de un blog que suelo seguir y me tope con una lista de reproducción. Sé que fue creada para esa persona, la dueña de ese blog, supongo que con el fin de ponerle sonido a las palabras de su alma, pero yo curioseando me sentí atrapada por esas canciones. La lista de reproducción se llama "songs to be alone."

Mientras escucho las canciones puedo generar mis propios sentimientos, los que me despiertan esos acordes, que no sé si distan mucho de los sentimientos de la chica para quien fueron pensados; pero bien, entre canción y canción mis pensamientos se estimulan y se llenan de nostalgia. Recordé todo lo que pudo haber sido y no fue, en lo que soñé y no se realizó, en lo que pensé y el viento se llevó, en lo que dije y en piedra no se grabó... Los seres humanos tenemos una mañosa capacidad de magnificar el pasado, no entiendo por qué hay tanta predisposición a aferrarse a las cosas que extrañamos y que nos llenan de tristeza, es increíble que las personas seamos tan vulnerables y nos falten tantos afectos que con gran facilidad bajamos al lado negativo de la bipolaridad. 

Afortunadamente entre las canciones había una llenita de trompetas y voces que tarareaban lalalalala... de no ser por esa canción me quedo en el pozo negro, tratando de ver lo que ya no se ve. Acto seguido a la alegre canción, pensé en que todo es cuestión de perspectiva, de foco, de filtro... algo así como tomar una foto. Las cosas no siempre son como las vemos, sino como las queremos ver y eso es lo que hace el fotógrafo, preparar la composición para que todo se vea bonito, en armonía, con la mejor iluminación y presiona el obturador de acuerdo a la imagen que quiere capturar, por eso unas veces es rápida y otras lenta, unas veces abre el diafragma y en otras lo cierra, unas fotos las hace a mano y en otras se apoya en el trípode, unas las toma con luz natural y otras las ilumina. Finalmente comprendí que hay que ser como las polaroid, recordar siempre lo mejor del pasado, pero buscar la mejor manera de lograr los matices, los colores,las texturas, las velocidades que queremos en la vida. 

La lista de reproducción no ha parado, y suenan unas guitarras, un country de esos que evocan los viejos pueblos norteamericanos, pero que son poesía. Sé que todo evoca a estar sola, pero es que sólo cuando nos encontramos a nosotros mismos somos capaces de compartir el mundo con otros. La música fue como una banda sonora mientras escribía, pero los días deben ser como una fotografía con efecto polaroid. 

Les comparto la lista de reproducción http://8tracks.com/cookc3/songs-to-be-alone-to


lunes, 28 de noviembre de 2011

Time to Sleep

Volví al libro y leí: "nuestra cabeza es el peor lugar para perdernos"
- creo que compraré un atrapa sueños. -me dije y me puse cómoda para dormir nuevamente. 
Dormí sin dejar de pensar si algún día podré salir de aquel laberinto  antes de morir, aunque,  después de todo, es el laberinto de mi vida. 
                                                                                                                               Me la encontré por ahí. 



Los días se sienten turbios, por más que el sol resplandezca el aura gris de la tormenta que se avecina cobra más fuerza y no queda de otra que buscar un lugar para escamparse. Cuando el torbellino comienza a hacer sonar las hojas de los árboles y ellas comienzan a caer precipitadas sobre la hierba, entonces es que es hora de cerrar los ojos y dormir. 
El mundo corre demasiado rápido y yo no puedo ir a su velocidad. Lo he intentado,  he llevado mis últimos 27 años intentando vivir una vida acelerada, pero ya la mente está al borde del colapso y es tiempo de cerrar los ojos y dormir y dejar que sea Morfeo quien conduzca la nave de mis sueños, yo por ahora sólo quiero dejarme llevar. 
No quiero pensar, ya he pensado tanto y es que creo que ya no lo estoy haciendo bien, estoy dando vueltas en los mismos círculos viciosos y necesito una pausa. De este viaje al mundo onírico sólo espero una sola cosa: escuchar mi corazón, y cuando vuelva de ese viaje al otro lado del espejo, quiero vivir con libertad, abrir el corazón y permitirme ser feliz. 
Cuando pienso en que es tiempo de dormir, lo que hago es elevar un decreto para aquietar mis pensamientos, para alzar mi mi espíritu, para mirar el vacío y esperar que una señal se convierta en mi musa inspiradora. 


Se que hay un mundo afuera, pero primero debo encontrar algo allá adentro, algo que me devuelva la vitalidad que se requiere para enfrentar este mundo que queda en el lado más humano, sensible y realista del espejo, este lado que no es otra cosa que la vida misma. 

jueves, 3 de noviembre de 2011

Bienvenido al resto de mi vida!!!



Normalmente cuando se aproxima la fecha de mi cumpleaños, mis pensamientos me hacen malas jugadas y comienzan las confrontaciones internas, sobretodo aquellas en las que miramos los indicadores que nos proponemos años tras año y en las que el semáforo nos pone en alerta roja porque estamos en deuda con la mayoría de nuestros sueños. Pero y es que en qué me he gastado tanto tiempo que aun no veo materializados todos esos propósitos que tenía indicados a determinada edad?


Bueno, por fortuna el día del cumpleaños ya pasó y pude hacer ese proceso de reconciliación en el que dejo de mirar la vida de manera cartesiana y comienzo a valorar esas otras cosas que sin ser planeadas han hecho que todo este tiempo sea un proceso de aprendizaje lo suficientemente valioso. Sí, valioso, porque es la vida misma con sus conspiraciones a favor y en contra, con los amigos que vienen y los que se van, con los sueños que se construyen y los que se desmoronan. Lo más importante es siempre tener algo que hacer, un sueño que seguir, una meta que alcanzar y una ilusión que nos recuerde que estamos vivos y que esto es un asunto que se logra con acción y no solo con deseo.

No importa cuantas veces nos hemos tropezado, es más no importa si aun no nos hemos tropezado lo que vale la pena reconocer es que se es joven sólo una vez, pero se tienen momentos de inmadurez siempre. 

No hay instrucciones para vivir, pero ahora que se me vienen los 30, que ya los veo cerquita, esta sería la lista que según la película mexicana "Efectos Secundarios" sería lo que habría que hacer. La compartiré hoy porque estoy segura de querer seguirla al pie de la letra y si es el caso me encargaré de que haya otro par de detallitos más. 

1. Haz una lista de todo lo que no te gusta de tí y luego tírala. Eres el que eres!!! Después de todo no es tan malo como te imaginas un domingo de cruda

2. Tira el equipaje de sobra, el viaje es largo. La carga no te deja mirar hacia adelante, además, jode la espalda. 

3. No sigas modas. En 10 años te vas a morir de la vergüenza de haberte puesto eso de todas maneras

4. Besa a tantos como puedas 

5. Deja que te rompan el corazón

6. Enamorate 

7. Date en la madre y vuelve a levantarte. Quizás hay un amor verdadero, quizás no. Pero mientras lo encuentras, lo bailado ni quien te lo quita. 

8. Come frutas y verduras. de verdad! Vete acostumbrando a que no vas a poder comer porquerías toda la vida. 

9. Equivócate, cambia,  intenta, falla, reinvéntate

10. Manda todo al carajo y empieza de nuevo cada vez que sea necesario. De verdad no pasa nada, sobretodo si no haces nada 

11. Prueba otros sabores de helados, otras cervezas, otras pastas de dientes.

12. Arranca el carro un día y no pares hasta que se acabe la gasolina.

13. Empieza un grupo de Rock, por qué no?? toma clases de baile

14. Aprende italiano

15. Invéntate otro nombre 

16. Usa una bicicleta 

17. Perdona, olvida, deja ir...

18. Decide quien es imprescindible 

19. Mientras más grande eres más difícil es hacer amigos de verdad y más necesitas quien eres sin que tengas que explicárselo. Esos son los amigos, cuídalos y mantenlos cerca.

20. Aprende que no vas a aprender nada, pero no hay examen final en esta escuela, ni calificaciones, ni graduación, ni reunión de exalumnos, gracias a Dios...


"Bienvenido al resto de tu vida"